lunes, 23 de agosto de 2010

Sangre joven

No puedo imaginarme, en este momento de la noche, cansado de un día largo e intenso de laburo, culminado con tres horas de clase en la que, una vez más, he intentado generar en los alumnos alguna emoción, alguna inquietud, algún respeto por lo que merece respeto (que son muy pocas cosas), y que ha tenido, el día, tantas obligaciones concretas e inmediatas, tantas instancias en que la realidad kafkiana del Uruguay y las instituciones ha vuelto a limar con displicencia y necedad los bordes desiguales de nuestros deseos, y que ahora, en este momento de la noche, termina con una aciaga circunstancia en que me enfrento a un estúpido comercial de televisión, adornado con una musiquita y una voz que ya he escuchado antes innumerables veces y que ya son parte del paisaje visual y sonoro de este país, no puedo imaginarme, decía, algo más deprimente que el Día del Comité de Base.

13 comentarios:

  1. ¡Animo Lorre!,apague la televisión, tómese unos dobles con mucho hielo, piense en la lucha de los próximos años, que los Comites de Base pertenecen al pasado como una vieja musiquita que se cuela por una ventana. Hace un rato yo estaba escuchando a Cream es casi tan viejo como esa musiquita pero me transportó al futuro.

    ResponderEliminar
  2. Ya lo hice, Castrato. Pero mire que sus recomendaciones de tapar el sol con un dedo no me dieron mucho resultado.

    ResponderEliminar
  3. La primera cosa que merece respeto, entre esas pocas que usted menciona, es el respeto a uno mismo. Y ese es el que nos salvará,Lorre se lo aseguro. ¡Animo!.

    ResponderEliminar
  4. Lorre. Hay cosas infinitamente peores. Se lo puedo asegurar. No sabe cuánto. A veces no alcanza con apagar la radio, es cierto. Pero hay que buscarle la vuelta de alguna manera. Tampoco es sano sumirse en la amargura y el pesimismo sin salida porque es casi tan inútil como el insulto catártico, mesiánico. ¿Después cómo se sigue? En fin, tómese algo, vea películas de Ford, lea, en definitiva: viva. Porque lo otro es morir.

    ResponderEliminar
  5. Debo estar sonando muy dramático, ya que los comentarios tienden a darme consejos, cosa que agradezco. Ahora, me pregunto, ¿se me está tomando LITERALMENTE? Si hemos perdido la ironía para subsistir a la tierra baldía y al Día del Comité de Base, entonces sí, estamos jodidos. Además, siempre tendremos el pop (ver post siguiente). Gracias de todos modos. Sin ironía.

    ResponderEliminar
  6. Está bien, Lorre. Se ve que no lo entiendo muy bien. De hecho: no lo entiendo. Pero así es la vida.

    ResponderEliminar
  7. Deduzco, Peter, que tampoco te plegás a la Noche de la Nostalgia....y que la noche de brujas no te disfrazás. ¿por qué no formamos un club???

    ResponderEliminar
  8. Déle, mi querida Lajack. Formemos el Círculo de los Misántropos. Pero le aclaro una cosa: prefiero empeñar el sueldo en un boliche atestado de rebaños humanos y ponerme una máscara de Freddy Krugger que ir a tomar mate a las 10 de la mañana para discutir con septuagenarios malhumorados si estamos en camino al socialismo. A cada cual le pega donde le pega, vio?

    ResponderEliminar
  9. Ay siiií, el Círculo de los Misántropos me encantó. Voy a hacer una lista de odios como la del amigo Castrato (pero la mía va a ser mayor!!!), y en el primer lugar coloco a algunos septuagenarios que conozco de primera mano (desde el que cobra una jubilación posta habiendo laburado con "labia" hasta el que se cuelga de la luz de la calle pero junta firmas por el oso panda).
    Un consejo jodido: andá sin máscara, jeje.

    ResponderEliminar
  10. Adelante, muñeca. Esas listas son muy sanitarias.

    ResponderEliminar
  11. Uys, Lorre, me imagino su depre... Sin embargo, estoy de acuerdo con Castrato... hay tantas cosas peores. Imagínese el día del baluarte, o del club de amigos, por ejemplo! Sólo de pensar en ello, ya se me arruina el día patrio!
    Salud!

    ResponderEliminar
  12. Me zumbaba la cabeza desde que leí este post. Y ahora recién caigo en la humorada, THOMAS BERNHARD, usted es un picarón Lorre. Simuló ser el alter ego del escritor. Deberíamos llamar a Umberto Eco para descifrar sus post. Porca Miseria!

    ResponderEliminar